22 abril 2012

Tergiversación de la realidad

Eh pues el título me quedó bien bonito, pero a pesar de lo que puedas pensar, esta entrada tratará sobre mi opinión de la película “Intruders”. La fui a ver este fin de semana y que malas son las reseñas que hacen de una película. No dicen de qué trata con exactitud. Supongo que es parte de la mercadotecnia.
Antes que sigan leyendo, les ADVIERTO que voy a desvelar toda la trama de la película, la cual, por cierto, es muy simple. Así que si quieres ir a verla y eres de los que no les gusta saber la trama, mejor lee esto después de la que la hayas visto. Personalmente no me importa mucho que me digan la trama, es más, muchas veces pregunto que sean explícitos. Para mí lo más importante es como se cuenta una historia, no tanto la historia en sí.
Y esto no es nuevo, por ejemplo, los griegos, que tanto les gustaba hacer teatro, tenían como pinchemil versiones del drama de Edipo; todo mundo sabía de que trataba Edipo, pero iban a verla una y otra vez, porque les interesaba ver la interpretación o visión de lo que vendría siendo el director de aquel entonces, y ya no tanto la historia, pues ya la conocían de antemano. No hay nada nuevo bajo el sol.
Pues “Intruders” es una película más bien lenta, ambientada en poblaciones tirándole a pueblito, eso sí, muy bonitos, y dado que es una producción anglo-española, se hablan los dos idiomas en un porcentaje 85% inglés 15% español. Comienza en un departamento de clase media, donde una madre esta acurrucando a su niño para que se duerma. El niño le está contando una historia de “terror”, llegado a un punto, no sabe como continua. Se da a entender que la madre es española, pues ambos entablan la conversación en español de España (bueno, es que también existe el español de México y el español de Guatemala, etc.) y que viven en España.
En cierto punto, el niño tiene una pesadilla, o eso quiere dar a entender, pues “ve” al monstruo entrar por su ventana. El monstruo esta vestido como monje medieval, pues no se le nota el rostro, de ahí que el niño lo nombre como “cara hueca” (español) o “hollow face” (inglés) y se lo quiere llevar. Comienza a gritar y la mamá acude en su ayuda, enfrentando al monstruo, llamando su atención y corriendo a su habitación, donde la persigue el monstruo. El niño entonces va a la habitación de la madre y mira como el monstruo esta ahorcando a su madre, por lo que le dice que la deje en paz. El monstruo deja a la madre y se vuelve a enfocar en el niño. Nuevamente la madre ataca al monstruo, le dice al niño que corra y el niño sale por la ventana. Pero como están como en el séptimo piso, no hay a donde ir, por lo que el monstruo lo persigue, llegando a un punto donde el monstruo está tomando al niño por las piernas, la madre toma los brazos y entablan un forcejeo en la cornisa.
Al final, el monstruo cae, el niño y la madre se abrazan y entra el cuadro de negro, para indicar separación de escena. En la siguiente, conocemos a otra familia, conformada por padre, madre e hija de 12 años. En las escenas subsecuentes nos enteramos que la niña visita a sus abuelos, los cuales poseen una enorme casa con  un todavía más enorme jardín, y trepa a un árbol. Le llama la atención un hueco que hay en el tronco del árbol, mete la  mano y saca una cajita de madera, con una hoja dentro.
La hoja es una historia, la historia de cara hueca. En algún punto te enteras que ese escrito, es el escrito del niño del inicio. En otra escena, vemos a la niña leyendo a su clase, la historia-cuento de “hollow face”, pero como nada más se lo plagió, no sabe como terminar el cuento.
Poco después, la niña comienza a recibir los ataques del “cara hueca” e incluso el papá (Owen) llega a tener una confrontación con la entidad. Total, llaman a la policía, instala cámaras de seguridad, alarmas, etc., pero el ente sigue atacando a la niña.
Bueno ya escribí mucho, así que iré al grano. Resulta que el papá de la niña  es el niño del inicio, y el tal “cara hueca” no es otro más que el papá del niño, el cual fue un delincuente. De ahí que haya nombrado a esta entrada “tergiversación” pues desde el punto de vista psicológico, se puede entender que el niño, al tener demasiada angustia y tensión por ver a sus padres pelear, su mente decidió “enmascarar” al padre (el cual, al estar preso, prácticamente fue un padre ausente) y darle la forma de “cara hueca”, porque además, al momento de la agresión (que en realidad el padre quería conocer a su hijo, pero como era violento y medio wey, pues hizo todo el drama inicial) traía una sudadera con capucha.
Así que la mente del niño crea al personaje “cara hueca”, para aliviar y justificar la agresión sufrida por el padre. Porque, en su mente, no fue el padre quien lo agredió, fue “cara hueca”. Y cuando el monstruo cae por la cornisa, es en realidad el padre que cae, muriendo en el acto. Esto es algo que se explica casi al final de la película.
Lo que no me gustó, es porque la niña (la hija del niño, que ahora es un hombre) tiene la misma fantasía que el padre (el “cara hueca”) si ella no sufrió del episodio violento. Es como si el personaje imaginado por el niño cobrara vida y se quisiera desquitar con la hija. Pero insisto, la hija vive en un ambiente amoroso, tiene alta auto estima, es popular en su ambiente, es decir, no tiene (al menos no se mencionan en la película) elementos para generar una psicosis, como lo hizo su padre. De hecho, generar la misma psicosis, lo cual por sí misma ya sería muy raro de lograrse.
Esta película es de esas que tienen buena reseña, pero mala implementación. Si pensabas que era una película de terror o sobrenatural, nada que ver. La recomiendo, bueno, no, no la recomiendo.

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