Ser latino ¿se nace o se hace?

Estaba viendo el tuiter (ahora “equis”, pero yo le voy a seguir diciendo tuiter) y me llamó la atención una pequeña controversia[1] sobre la cuestión de si Jenna Ortega es latina o no. Eso se debe a que hace tiempo escribí que me parece una tomada de pelo considerar a Thalía o a Salma Hayek las representantes de la mexicanidad (no, para nada representan al mexicano).

De esa misma manera, sin pensarlo mucho, dije para mi mismo “no, ella no es latina. Parece latina, pero no es latina”. Muchos comentarios a favor de que es latina y muchos (que no la quieren) que no lo es. Lo cierto es que no es latina. Parece latina, pero no lo es. Y no, a mi no me cae mal, ni la conozco; pero me gusta verla en pantall, me llena la vista; me gustó su participación en la serie de Netflix Wednesday. Para efectos pragmáticos, me cae bien.

Pero no es latina, porque para ser latino, se tiene que aprender, como todo en la cultura y el ser latino es una cuestión cultural. Dado que ella no vivió ni vive en una cultura latina, no puede ser latina. Sus papás, según leo, son puerto mexicanos, pero no le inculcaron la vida latina (me parece).

A diferencia de lo que muchos dicen, sí es requisito sine qua non hablar español, bueno hasta entra en el latinismo, hablar spanglish. Pero Jenna habla cero español. Así que no, no es latina.

Si se pregunta porqué es necesario hablar español para ser latino, eso se debe a que, como ya mencioné, ser latino es una cuestión cultural, por lo que no puedes nacer latino. Te conviertes en latino, bajo la cultura latina. La cual, además, es muy diversa. Los mexicanos son latinos, así como los cubanos, los argentinos, los guatemaltecos, y un largo etcétera. Así que tenemos muchos sabores de latino. Por cierto, Enrique Iglesias tampoco es latino. Es hispano.

Quiero hacer una aclaración. Al referirme aquí como latino, en realidad me refiero a ser latinoamericano, porque los latinos, así como tal, son de Italia (natural de Lacio, región de Italia, dice google). Y en general, latino se refiere a todas las lenguas que descienden del latín, del latín vulgar, además, no del latín culto.

Sin que usted amable lector se diera cuenta, acabo de aseverar que la lengua, está muy relacionada con la cultura. Hablar español, te da mucho contexto cultural. Porque a través del lenguaje expresamos nuestras ideas y la cultura está repleta de ideas. Así que sí, si Jenna no habla ni un ápice de español, no puede ser latina (además de no cumplir con otras particularidades).

Que Jenna Ortega no sea latina, no es malo. Más bien creo que quien sí esta preocupado son sus patrocinadores y todos aquellas entidades que dependen de Jenna para sus ingresos monetarios. Los latinoamericanos somos legión, quiero decir que somos un chingo que se refleja en mucho, mucho, mucho dinerito. Por eso resulta muy importante que a Jenna la identifiquen como latina, para que sea vendida como tal.

La mayor confusión, me parece, es que la mayoría de la gente se va con el fenotipo y deja de lado el genotipo. Es decir, la gente se va con la apariencia de la persona. Y sí, efectivamente, Jenna Ortega luce como cualquier chancluda[2] de latinoamérica. Pero hasta ahí, culturalmente es una gringa. Y no es la única.

Otra famosa “latina” (falsa latina) de antaño es Jessica Alba[3], la cual curiosamente también lleva apellidos latinos, pero tampoco se debe considerar latina. La misma razón, apenas si balbucea un poco de español. Pero parece latina, su fenotipo es muy latino, pero no su mente.

Voy más allá. Voy a mencionar unas mujeres que aunque no parecen latinas, en realidad sí lo son o quieren serlo. La primera Anya Taylor-Joy[4]. Güerota de rancho, parece más proveniente de Albania, Ucrania o Rusia que de latinoamérica. Habla perfecto argentino y por las entrevistas que he visto de ella, tiende a ser más de la cultura latina que de la estadounidense.

Otra, Sandra Blust. Ella me parece un perfecto paradigma de muestra para enfatizar que ser latino no implica nacer en un país latinoamericano o tener una apariencia latina (prietito[5]) o tener padres latinos. Ella es una creadora de contenido que mantiene un canal de Youtube con su novio ese sí, latino (es mexicano me parece).

Si ven su canal, se darán cuenta que aunque sabe bastante español, no es fluente, se nota su acento, es una gringa de cepa, pero le gusta la cultura latina, y por mucho, a ella si la considero una latina o al menos una mujer que quiere ser latina. Aquí resalto que para ser latino es más una cuestión cultural que de genética. No habla bien español, es una güerota con clásica apariencia estadounidense, nació en un el país imperialista por antonomasia y aun así, creo que ella sí es latina (al menos se vive como latina).

Una más, que no cumple con el fenotipo latino, pero que también la considero latina, Ana Saia, otra youtuber. De mamá mexicana (muy del norte de México, me parece) y papá gringo. Aunque tampoco habla español de manera fluida, lo entiende perfectamente y tiene vídeos muy carismáticos con su muy latina mamá. Si no hablara español, ni tuviera vídeos donde sale con su familia, nadie pensaría que ella es latina. También es un estereotipo fenotípico de la gringa promedio.

Así pues concluyo que para ser latino se hace no se nace. Y no tiene nada de malo que Jenna Ortega no sea latina. O bueno, es malo para los que no podrán explotar su inexistente lado latino (el cual por cierto, sí puede explotarse si nada más se ciñen a la cuestión gráfica, porque sin duda alguna, Jenna parece latina. Pero no lo es).



[1] https://elle.mx/celebridades/2024/08/27/jenna-ortega-suficientemente-latina-no-hablar-espanol

[2] Derivado de chancla o sandalia

[3] Me enamoré de ella cuando salio en Dark Angel

[4] Mamita

[5] De tez morena

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