miércoles, 25 de noviembre de 2009

Inteligencia y belleza

Desde que conocí el trabajo de la Doctora Dresser quede impactado por su agudeza intelectual, de la manera en que expone sus ideas, con esa forma tan calmada para decir “ustedes bola de huevones, hijos de probeta, corruptos, ladrones, son responsables de la pobreza del país” y que además le aplaudan los aludidos. Esta es mi interpretación, porque en realidad la Doctora Denisse Dresser dijo:

“Peor aún, convierte a representantes del interés público -muchos de los diputados y senadores sentados aquí- en empleados de los intereses atrincherados. Convierte al gobierno en empleado de las personas más poderosas del país.”

Tras lo cual, una apoteótica cascada de aplausos de los antes mencionados, hato de cerdos y bueyes, le dieron. Supongo que no le entendieron (aunque es bastante claridosa) o la falta de vergüenza y honor les hizo aplaudir como si estuvieran oyendo al presidente en turno en su oratoria del informe de gobierno, bajo la premisa de que si yo aplaudo el aludido es mi compañero. Todos aplaudieron.

Creo que la inteligencia también es afrodisiaca, porque ¿a poco no es atractiva la Doctora Dresser? ¿o será que tengo el síndrome del lobo feroz? Sabe, pero con todo respeto Doctora Dresser, ¡Qué guapa es usted! ¡Y qué manera de madrear con guante blanco!



Discurso completo

1 comentario:

Nash dijo...

No le entendieron. Y sí.. la inteligencia puede resultar afrodisiaca, jeje...