Tiene hocico como de perro, se mueve como perro, come como perro, lo más seguros es que sea un perro.
Partidos y sus militantes. Aunque en este caso, sus dirigentes. En particular, a este tipo, que de mamarracho no pasa, es un ser deplorable, hipócrita y corrupto. Político mexicano, además de ser una estrella más del canal más estrellado de México. Posiblemente se trate de una campaña en contra del dirigente del Partido Nueva Alianza, partido mejor conocido como el Panal, aunque particularmente no lo creo.
Ese partido, es de los partiditos que se dedican a sangrar al ya de por sí famélico presupuesto anual. Como iba diciendo, el señor Kahwagi nada más me agrada cuando lo madrean –ya ven que dizque es boxeador, además de empresario, estrella y político-. Y esto me hace preguntarme ¿con tal personaje tan polifacético, por qué es una nulidad cómo político? ¿cómo es posible que sea el presidente, por muy pequeño que sea, de un partido político? ¿es que los partidos no tienen reglamentos internos que establezcan la calidad moral de sus dirigentes? Y todavía se atreve a salir en infomerciales partidistas, haciéndole al cuento de que se encuentra comprometido con el futuro de México, que sí se puede, que ellos –su paritidito y secuaces- son el futuro, son el verdadero cambio.
Una muestra más de lo deplorable que resulta ser un político en México. Y luego porque la mayoría de la gente no se interesan por la política. Hoy, en México, interesarse en la política, es interesarse en el estudio de las heces fecales.
¡Ah sí! Todo lo anterior porque el boxeador de quinta Jorge Kahwagi, presidente del Partido Nueva Alianza es un ladrón. Pidió prestado un millón y medio de pesos, los cuales, llegado el término del tiempo pactado para devolverlos, el mencionado criminal se negó a pagarlo. El colmo del asunto es que metió a la cárcel al prestamista. Y miren que por lo general los prestamistas más bien son agiotistas. Mi crítica es que Kahawagi hizo uso de sus “poderes” como político corrupto (suena a pleonasmo, pero en teoría no lo es) para no pagar. Espero que el dinero para saldar su deuda no salga de las arcas del erario público. Aunque lo más probable sea que Jorge Kahwagi salga impune, ya ven que eso casí no pasa en el país donde nada pasa.
La gente que votó por este tipejo ¿se encontrará bien de sus facultades mentales?
Nota contextual
Partidos y sus militantes. Aunque en este caso, sus dirigentes. En particular, a este tipo, que de mamarracho no pasa, es un ser deplorable, hipócrita y corrupto. Político mexicano, además de ser una estrella más del canal más estrellado de México. Posiblemente se trate de una campaña en contra del dirigente del Partido Nueva Alianza, partido mejor conocido como el Panal, aunque particularmente no lo creo.
Ese partido, es de los partiditos que se dedican a sangrar al ya de por sí famélico presupuesto anual. Como iba diciendo, el señor Kahwagi nada más me agrada cuando lo madrean –ya ven que dizque es boxeador, además de empresario, estrella y político-. Y esto me hace preguntarme ¿con tal personaje tan polifacético, por qué es una nulidad cómo político? ¿cómo es posible que sea el presidente, por muy pequeño que sea, de un partido político? ¿es que los partidos no tienen reglamentos internos que establezcan la calidad moral de sus dirigentes? Y todavía se atreve a salir en infomerciales partidistas, haciéndole al cuento de que se encuentra comprometido con el futuro de México, que sí se puede, que ellos –su paritidito y secuaces- son el futuro, son el verdadero cambio.
Una muestra más de lo deplorable que resulta ser un político en México. Y luego porque la mayoría de la gente no se interesan por la política. Hoy, en México, interesarse en la política, es interesarse en el estudio de las heces fecales.
¡Ah sí! Todo lo anterior porque el boxeador de quinta Jorge Kahwagi, presidente del Partido Nueva Alianza es un ladrón. Pidió prestado un millón y medio de pesos, los cuales, llegado el término del tiempo pactado para devolverlos, el mencionado criminal se negó a pagarlo. El colmo del asunto es que metió a la cárcel al prestamista. Y miren que por lo general los prestamistas más bien son agiotistas. Mi crítica es que Kahawagi hizo uso de sus “poderes” como político corrupto (suena a pleonasmo, pero en teoría no lo es) para no pagar. Espero que el dinero para saldar su deuda no salga de las arcas del erario público. Aunque lo más probable sea que Jorge Kahwagi salga impune, ya ven que eso casí no pasa en el país donde nada pasa.
La gente que votó por este tipejo ¿se encontrará bien de sus facultades mentales?
Nota contextual
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